El ser escritor, es un oficio tan noble que nadie se detiene a recordarlo.
Es como si no nos interesa cultivar el alma, vivimos a miles de revoluciones y lo URGENTE tapa lo IMPORTANTE.
El "Día del Escritor" se celebra los 13 de junio en homenaje al nacimiento de Leopoldo Lugones.
Leopoldo nació en Córdoba en el año 1874. Su obra fue abundante y él multifacético, recorrió la mayoría de los géneros.
Entre alguna de sus obras se encuentran: La guerra gaucha, Lunario sentimental y Crepúsculos del jardín.
Fue precursor de toda una generación de escritores argentinos; fundó la sociedad argentina de escritores y dirigió La biblioteca Nacional de maestros, que hoy lleva su nombre.
Sus padres eran Santiago Lugones y Custodia Argentina.
Su adolescencia transcurrió en Córdoba y allí su vida literaria y periodística.
Se adjudico un Pensamiento libre. Fundó el primer centro socialista de Córdoba. Lo describían como un bizarro muchachón de 22 años de anteojos, eso decía su mejor amigo Rubén Darío.
Fue empleado del correo, fue inspector de enseñanza media. Se convirtió en un eximio poeta, orador y polemista. En 1897 nace su único hijo.
El 18 de febrero de 1938 se suicidó en un cuarto del Tropezón, en una isla del Tigre.
Su mejor discípulo fue Jorge Luis Borges (nada mas y nada menos).
Leopoldo, fue el poeta del régimen, el poeta burocrático, el intelectual de la oligarquía.
Pero sin embargo los jóvenes acabarán reconociendo en él, al gran escritor, sobre todo después de su muerte.
Hizo falta que desapareciera el hombre que atraía la polémica, para que su obra fuera considerada con serenidad.
Y él decepcionado por la marcha de la historia política argentina y quizás desengañado, una vez mas de sus ideas políticas, se mata a un año del suicidio de Horacio Quiroga, mezclando arsénico y whisky.
Un final trágico, digno de un escritor a punto de plasmarlo en una hoja.
El olvido es terrible y contundente para estos "hombres", en honor a ellos y a nosotros mismos, busquemos sus obras y a leer !!!.
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