Los investigadores sabían que al departamento 6A de la calle Aguirre al 200 no había entrado nadie ajeno al grupo familiar Seltzer.
Los ingresos no estaban forzados y el plexo probatorio daba indicios hacia un triple crimen seguido de suicidio que lo completaban un cuchillo ensangrentado, una carta en la cocina y un tratamiento psiquiátrico de una de las víctimas.
El análisis de los forenses fue clave y la principal hipótesis es que "la madre mató a su esposo y sus hijos, Ivo e Ian, y se suicidó en el baño del departamento familiar".
Laura, cuyo cuerpo fue encontrado en el baño, tenía una herida mortal en el corazón, pero no presentaba signos de haberse defendido de un ataque.
Y remarcaron que "su cadáver era el que presentaba menor rigidez cadavérica, por lo cual es la última que murió".
"La carta que fue hallada en la cocina estaba escrita por alguien que no estaba en sus cabales", ampliaron.
La hermana de la mujer fallecida había comentado a los investigadores que estaba bajo tratamiento psiquiátrico.
Y la empleada doméstica testificó que "Laura hacía unas semanas que estaba distinta".
Comentó que le molestaba que prendiera la aspiradora y le pedía que se vaya antes de horario, sospechan que habría dejado de tomar la medicación.
De acuerdo al parte policial, se descarta que se trate de un hecho de intento de robo a raíz de que la trabajadora entró a la casa a las 13:30 horas con sus llaves y la puerta de ingreso no presentaba indicios de haber sido violentada.
En la primera hipótesis, el padre de la familia, identificado como Bernardo Sergio Seltzer (de 53 años) fue sospechado de haber matado a sus dos hijos, Ivo (de 13 años) e Ian (de 15 años), y a su esposa, Laura Leguizamón (de 51 años).
Pero luego la investigación señaló a la mujer como autora de los hechos.
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