Ante la denuncia de Yañez, Ercolini ordenó "prohibirle la salida del país al ex Presidente y medidas de restricción y protección para que no se acerque a ella".
Todo comenzó después de que el juez encontrara en el celular de María Cantero, ex secretaria de Fernández, una serie de mensajes con Yáñez sobre supuestos actos de violencia.
Tras el hallazgo, Ercolini resguardó el material, notificó a la Oficina de Violencia de Género de la Corte Suprema y luego contactó a la ex primera dama, a través del abogado Juan Pablo Fioribello, quien la había representado en otras causas.
Fioribello se encargó de realizar la gestión y la primera videoconferencia se realizó a fines de junio.
Pero en ese momento, Yáñez no quiso instar la acción penal.
Consultado sobre esa acusación, el ex Presidente Alberto Fernández señaló en declaraciones que "demostrará ante la Justicia la falsedad de lo denunciado".
"Estoy por sacar un comunicado. Es todo lo que diré. El resto lo haré ante la Justicia. Es todo falso. Pero todo lo demostraré ante la Justicia", sostuvo.
Por su parte, Fioribello dijo que se enteró de la denuncia de Yáñez porque "la situación se precipitó".
"La noté muy angustiada, me dijo (No aguanto más esta situación y lo acabo de denunciar)", señaló el letrado.
Según detalló, "Yáñez se comunicó con el juez Ercolini y le dijo que quería levantar el archivo de las actuaciones y realizar una denuncia penal por los golpes y amenazas que habría recibido de parte de Fernández".
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