En un video que fue grabado por otro estudiante, se observa una feroz pelea dentro del aula entre dos adolescentes de primer año.
Aunque no se alcanza a oír con claridad, luego se conoció que uno de los jóvenes fue agredido verbalmente por su autismo y por su tamaño.
Frente al insulto, el chico reaccionó de la peor manera: se acercó hacia su compañero, lo tomó por la remera y golpeó su cabeza contra el banco.
En las imágenes se escuchan los gritos del resto de los presentes, que no alcanzan a intervenir.
En respuesta a esto, el otro estudiante sacó una (gomera-hondera) del bolsillo y le tiró una piedra, situación que provocó una nueva agresión por parte del segundo estudiante.
Con más ira, lo volvió a atacar con golpes de puño, hasta que segundos después, una docente logró intervenir y frenar la pelea.
Autoridades de la institución confirmaron que el hecho ocurrió días atrás y que tomaron las medidas establecidas por "protocolo" para controlar la situación.
"Convocamos a las familias y hablamos con los alumnos", agregaron.
A su vez que "aseguraron que los inspectores están en conocimiento de lo sucedido".
"Hace más de 20 años que los profesores perdieron autoridad y control ante los alumnos y padres de los mismos, cada vez se complica más enseñar o volcar conocimientos", enfatizaron especialistas en educación.
"La sociedad en su conjunto tiene que volver a hacer respetar la figura del docente, ya la escuela dejó de ser el segundo hogar y pasó a ser un cúmulo de caprichos por una gran parte del alumnado".
"Para los alumnos que quieren aprender también es imposible estudiar, y para los directivos no es fácil coordinar las estrategias pedagógicas", finalizaron.
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