Bajo un clima violento, el Santos recibía al equipo argentino.
Recordemos que como consecuencia de la mala inclusión de Carlos Sánchez, la Conmebol le dio ganado por 3 a 0 el partido a Independiente frente a Santos, a pesar de que habían empatado sin goles en Avellaneda en la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
En los primeros 45 minutos, el equipo de Holan se paró bien en su campo y tuvo un acertado planteo táctico ante el local que buscaba desesperado convertir un gol.
A los 44´, le atajaron un penal a Maxi Meza.
Cuando se disputaba el tramo final del compromiso, los hinchas del Santos no soportaron el contexto y protagonizaron serios incidentes, con piedrazos, bombas de estruendo y hasta ingresaron al campo de juego.
Todo esto derivó en la represión por parte de la Policía.
El árbitro Bascuñán con mucho criterio decidió terminar el partido.
Ahora resta la formalidad de que le den a Independiente la clasificación a la próxima ronda.
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