La historia nos cuenta que los "Reyes Magos" fueron guiados por la estrella de Belén para agasajar con regalos el nacimiento del niño Jesús.
Para el corazón de chicos y grandes, los Reyes Magos eran tres: "Gaspar, Melchor y Baltasar".
Los regalos obsequiados en ese momento fueron: oro, mirra e incienso.
Baltasar le entregó oro, honrando a Jesús “Rey de Reyes”, cuidando su reino de amor, justicia y paz que sería extendido al mundo, además el oro simboliza la pureza, ya que el metal precioso no se altera, ni se corrompe.
Gaspar obsequió al Mesías, incienso, resultado de resinas aromáticas vegetales y aceites esenciales que al quemarse ofrecen un humo perfumado y que además significa, purificación, amplificación de la conciencia, representando lo espiritual.
Melchor le ofreció, mirra, sustancia que se untaba en los cuerpos de las personas que morían, y algunas hipótesis apuntan que señalaba su mortalidad como hombre para salvar al mundo.
En síntesis, la noche de Reyes, es la noche de las ilusiones y la inocencia de los niños, que alguna vez todos tuvimos en nuestra infancia y la tradición de dejar los zapatitos, pasto, agua para los camellos, junto a la cartita que redactábamos con amor solicitándoles los juguetes ansiados!!!.
Nuestro padres nos decían: – tenés que dormir, para que los Reyes, cuando vengan, te dejen el regalito-, y quién no, de la emoción, no se dormía, o intentaba “hacerse el dormido” y tratar de ver cuando los Reyes llegaban!!!.
Y después, esperando la llegada de quienes traerían esa noche los regalos, nos dormíamos soñando con un hermoso mundo lleno de fantasías... anhelando un mundo mejor.
En síntesis, la noche de Reyes, es la noche de las ilusiones y la inocencia de los niños, que alguna vez todos tuvimos en nuestra infancia y la tradición de dejar los zapatitos, pasto, agua para los camellos, junto a la cartita que redactábamos con amor solicitándoles los juguetes ansiados!!!.
Nuestro padres nos decían: – tenés que dormir, para que los Reyes, cuando vengan, te dejen el regalito-, y quién no, de la emoción, no se dormía, o intentaba “hacerse el dormido” y tratar de ver cuando los Reyes llegaban!!!.
Y después, esperando la llegada de quienes traerían esa noche los regalos, nos dormíamos soñando con un hermoso mundo lleno de fantasías... anhelando un mundo mejor.
Esas vivencias fueron tomadas en cuenta en las letras de nuestro Tango, que en muchas de sus letras homenajearon a los Reyes Magos, citaremos algunos:
“Papá Baltasar”, milonga de Sebastián Piana y Homero Manzi, que quedó como una joyita grabada por la orquesta de Aníbal Troilo y la voz del gran Francisco Fiorentino; “Seis de enero” Tango de Reinaldo Yiso y Arturo Gallucci, grabada por la orquesta de Alfredo De Angelis con la voz de Carlos Dante; “El bazar de los juguetes”, famoso Tango, de Roberto Rufino y Reinaldo Yiso grabado por la orquesta de Miguel Caló y la voz del siempre recordado Alberto Podestá, entre otros!!!.
A veces me pongo a pensar: ¿es importante seguir con la tradición de que los niños, sigan creyendo en los Reyes Magos?.
Y enseguida me contesto, sí, porque una importante parte de la infancia se basa en un mundo fantasioso, y supongo, que frente a una realidad terrenal cada vez más hostil, dónde los chicos no pueden comprender, es muy positivo.
Además, fomentar la ilusión en su inocencia, es también gratificante para los padres, que por un día vivimos “esa magia”, rememorando nuestras propias experiencias!!!.
Es importante recordar que, al fin y al cabo, los más chiquitos tienen en la cabeza muchos seres imaginarios que descubren que no existen, y no le dan mayor importancia.
Casi todos seguimos manteniendo muchas ilusiones renovadas cada año, con proyectos y sueños que nos hacen sentir nuestro trayecto de vida, con mayor felicidad!!!.
Los dejo reflexionando sobre esta "Noche de Reyes".
Me despido de ustedes hasta el próximo encuentro, cantando bajito:
"Patrón cierre la puerta, no me mire asombrado,
le compro los juguetes que tiene en el bazar.
Yo se los compro todos, no importa lo que gasto,
dinero no me falta para poder pagar.
Por una sola noche yo quiero ser rey mago,
para que los purretes de todo el arrabal
mañana al despertarse aprieten en sus manos
el sol de esta alegría que yo les quiero dar.
le compro los juguetes que tiene en el bazar.
Yo se los compro todos, no importa lo que gasto,
dinero no me falta para poder pagar.
Por una sola noche yo quiero ser rey mago,
para que los purretes de todo el arrabal
mañana al despertarse aprieten en sus manos
el sol de esta alegría que yo les quiero dar.
Al bazar de los juguetes,
cuantas veces de purrete,
me acercaba para ver.
Para ver de allí, de afuera,
desde atrás de esa vidriera
lo que nunca iba a tener.
Si mi vieja era tan pobre
le faltaba siempre un cobre
para comprarnos el pan.
Y hoy que puedo,
que la suerte me sonríe,
yo no quiero que haya un pibe
que no tenga
ni un juguete pa' jugar.
cuantas veces de purrete,
me acercaba para ver.
Para ver de allí, de afuera,
desde atrás de esa vidriera
lo que nunca iba a tener.
Si mi vieja era tan pobre
le faltaba siempre un cobre
para comprarnos el pan.
Y hoy que puedo,
que la suerte me sonríe,
yo no quiero que haya un pibe
que no tenga
ni un juguete pa' jugar.
Yo sé lo que es sentirse en una nochebuena,
teniendo por regalo un solo cacho 'e pan,
sabiendo que los otros, cruzando la vereda,
dejaban sus juguetes allí, en medio del zaguán.
Yo sé lo que es sentirse besado tiernamente
por una pobre madre que no me pudo dar
ni el más humilde y pobre de todos los juguetes
teniendo por regalo un solo cacho 'e pan,
sabiendo que los otros, cruzando la vereda,
dejaban sus juguetes allí, en medio del zaguán.
Yo sé lo que es sentirse besado tiernamente
por una pobre madre que no me pudo dar
ni el más humilde y pobre de todos los juguetes
por eso se los compro por eso nada más".
0 comentarios :
Publicar un comentario