Dios es justo y sabe de la pasividad del pueblo argentino.
Ya está, ya pasó el histórico festejo por el "Bicentenario de la Independencia Argentina".
No es el momento de analizar, la visita del rey de España (sic), el bostezo y el cansancio de nuestro presidente, Mauricio Macri (sic), el cara pintada Aldo Rico desfilando (sic), porqué tardamos tanto en reconocer a nuestros excombatientes de Malvinas, etc, etc.
Lo que importa es la emoción de nuestros "héroes" y el despertar de un sector de la población, que ayer les hizo sentir, que su lucha en las islas no fue en vano.
Ver a estos hombres desfilar con sus mujeres, hijos, nietos, amigos y compañeros de lucha de todo el país, fue mágico y el momento mas emotivo.
Verlos inflar el pecho, con la cabeza en alto y los ojos vidriosos por tantas lágrimas, te partía el "alma", porque ellos y nosotros sabíamos que extrañaban a los que quedaron muertos allá en el sur o los que se suicidaron acá.
Destacar que este gobierno les dio la posibilidad de participar en una fecha tan especial, es ser justo.
Condenar que desde 1982, todos los gobiernos se hicieron los "boludos" con ellos, es tener memoria. No se olviden que tenían 18 años cuando pelearon por su patria y cuando regresaron los que pudieron, "los hicimos entrar por la puerta de atrás".
De la excelente cobertura que realizó "Crónica TV" (siempre firme junto al pueblo), en cada nota de color, desde su impronta los excombatientes expresaban palabras como: Gracias, Honor, Recuerdos, Emoción, Volveremos y Viva la Patria !!!.
A 34 años, el reconocimiento llegó y ellos nos siguen enseñando con esas palabras que son mas "grande" que aquellos que los ocultaron durante tanto tiempo.
