La falta de gestión y la insensibilidad golpea en los que mas necesitan.
Se viven tiempos difíciles en el distrito de Ezeiza, ya no alcanza con tener como "vidriera", (el aeropuerto, el club, barrios cerrados, shoppings, parques industriales y palmeras).
La realidad indica otra cosa y no se la contiene.
Tres puntos que preocupan al vecino y los trabajadores de esas áreas:
1*: No hay entrega de leche suficiente que se brinda gratuitamente a las familias y niños de 0 a 6 años, del "Plan Materno Infantil".
2*: Hay un déficit de vacunas antigripal, no alcanzan.
3*: Y a los comedores, le llega muy poca mercadería y en algunos casos de mala calidad.
Nobleza obliga, este problema también se repite en otros municipios, la diferencia es que ellos hacen los reclamos en conjunto (el intendente con los concejales y el consejo escolar), en Ezeiza no.
Esconder los "focos de pobreza", parece ser que es moneda común en estos pagos, no tener datos estadísticos ni relevamientos de la gente que la está pasando mal, no existe.
El único termómetro real, son algunos maestros, algunos trabajadores de Desarrollo Social y vecinos solidarios que tratan de ayudar y contener con muy pocas herramientas.
Los políticos en Ezeiza, están "paralizados" y en muchos casos mirándose su propio ombligo.
Por parte de la provincia hay muchos problemas con la ayuda.
En la última elección Alejandro Granados sacó el 49 % de los votos, la pregunta sería, conformidad?, sumisión? o complicidad? por parte del vecino.
Todo reclamo por parte de los actores de la sociedad, se hacen a escondidas, ya que reina el miedo de denunciar públicamente.
Un engranaje bien aceitado para que la "justicia social" no llegue al territorio del "sheriff".
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