Un hombre (de 37 años) atacó a martillazos a su padre (de 71 años) en medio de un brote psicótico y al creerlo muerto se subió a su auto y condujo a alta velocidad hasta chocar intencionalmente contra una camioneta estacionada.
Este brutal episodio finalizó más tarde con ambos fallecidos en el Hospital de Mar del Plata, informaron hoy fuentes judiciales.
El hecho comenzó a investigarse, cuando se produjo un choque en la avenida Felix U. Camet y Condarco, donde un Volkswagen Gol, conducido por un hombre identificado como "Juan Schuttenberg" chocó contra una camioneta Ford Ranger que estaba estacionada.
Cuando la policía acudió al lugar y con la ayuda de ocasionales transeúntes intentó asistirlo, el hombre comenzó a gritar "maté a mi padre, me quiero matar".
Este brutal episodio finalizó más tarde con ambos fallecidos en el Hospital de Mar del Plata, informaron hoy fuentes judiciales.
El hecho comenzó a investigarse, cuando se produjo un choque en la avenida Felix U. Camet y Condarco, donde un Volkswagen Gol, conducido por un hombre identificado como "Juan Schuttenberg" chocó contra una camioneta Ford Ranger que estaba estacionada.
Cuando la policía acudió al lugar y con la ayuda de ocasionales transeúntes intentó asistirlo, el hombre comenzó a gritar "maté a mi padre, me quiero matar".
Por tal motivo, una comisión policial se dirigió hasta el domicilio del herido, quien fue trasladado en ambulancia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Mar del Plata.
Una vez en la casa del hombre, situada en Andrade al 1.900, los efectivos hallaron al padre, "Juan Francisco Schuttenberg" inconsciente y herido a golpes aplicados con un martillo, por lo que también fue trasladado al (HIGA), indicaron fuentes de la investigación.
Después de unas horas, padre e hijo murieron debido a las graves heridas que presentaban.
La causa, en la que intervino la fiscal marplatense Andrea Gómez, fue inicialmente caratulada como "Tentativa de Homicidio Agravado por el Vínculo" aunque tras el fallecimiento de ambos se recaratuló como "Homicidio Seguido de Suicidio".
De la investigación se desprendió que el hombre de 37 años era adicto a las drogas, lo que solía ocasionarle brotes psicóticos, y en ese marco es que atacó a golpes a su padre con un martillo en la cabeza.
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